Clasificatorio de Pontevedra

Lo primero que hay que decir es que corría este triatlón únicamente para clasificarme para el Campeonato de España, y me he clasificado. 

"Si te marcas un objetivo y lo cumples, no hay que darle más vueltas", dice José Andrés, el "ángel de la guarda" de mi rodilla. Pero la verdad es que ha sido la carrera más decepcionante que he hecho desde mi vuelta al triatlón el año pasado.

El día se prometía feliz en Pontevedra. Gran ambiente, tarde de sol y calor hasta el punto de prohibir el neopreno. Llego solo, aparco de casualidad justo al lado de boxes, saludo a Juan, un amigo del Triatlón de Noia, a Jesús y a Mónica y me trago una cola de media hora para dejar las cosas en boxes. Vemos que la transición es larguíiisima, y que hay una zona con piedras sueltas en el suelo sin moqueta, así que dejo mis calcetines junto al casco y el dorsal, y a calentar...ah, no, que no dejan calentar en el agua. Bueno, pues a achicharrarnos al sol hasta que deciden dar la salida.

Natación cómoda a una vuelta en el río Lérez, que por cierto estaba bastante sucio y me regaló una conjuntivitis para un par de días. Se da la salida desde el agua y siguiendo los consejos de Juan me meto hacia el centro del río ya que estaba subiendo la marea y debería haber corriente a favor a la ida. No sé si aprovecho la corriente, pero me veo rodeado de gente en todo momento y voy cómodo a pies. Giro y la vuelta se hace muy larga contra corriente. Salida del agua poco estilosa haciendo la foca (había que apoyarse y subirse a un pantalán) y creo que la cosa ha ido bien. Miro el reloj, esperando ver 14 y poco... pues no, 15:20. Menudo desastre (en las clasificaciones parece ser que nos quitaron a todos 1 minuto justo en el segmento). Puesto 169 de 204. Tela...

La T1 me sale rapidísima a pesar de los calcetines, y corremos un buen rato clavándonos piedrecillas y maldiciendo a los organizadores, ya que había formas de evitar ese paso, poner un poco de moqueta o al menos pasar una escoba. Luego la gente en los foros se queja de Laetus...que al lado de Lodeco son unos cracks. 

Me subo a la bici y empiezo a tirar como un loco hasta que cojo la rueda de uno que va a buen ritmo. Le doy un par de relevos y enseguida hemos formado un grupo de 6-8. El circuito es una aberración de curvas, rotondas, conos, baches, bidones caídos y apenas hay un repecho pero de los que se suben bien a plato. Son 4 vueltas y por lo menos sopla bastante viento para poner un mínimo punto de exigencia. La primera vuelta la paso expectante, y en la segunda y tercera tiro prácticamente toda la subida y recupero a rueda en las bajadas, con mucho cuidado de que no me tiren en un bandazo. Qué mal va la gente en grupo en los triatlones, por favor. Vamos cogiendo gente, por detrás llega alguno que ayuda, y la cosa sólo se para un poco en los tramos de viento en contra, pero enseguida algún listillo suelta un hachazo y los que tiramos nos ponemos de acuerdo para que no se escape. 

Sin mucho gasto de fuerzas, con tanto giro y tanta rotonda, llegamos a la cuarta vuelta en un grupo de unos 12-15 y en medio de una recta catapum...se van cinco tíos al suelo justo delante. Esquivo como puedo la caída y el resto de la vuelta la gente ya va más tranquila. Parcial 38º de 204, hubo más colaboración en el grupo de la que parecía.

T2 muy rápida, ésta me suele salir bien. Salgo a correr encendido...pero pronto me doy cuenta de que hace demasiado calor para correr por debajo de 3:40. Bajo un poco el ritmo a 3:50 y calculo en el punto de giro que Jesús me saca unos 2 minutos y Juan algo más de 30 segundos...de repente un dolor punzante bajo el diafragma me rescata de los cálculos mentales...¡¡¡FLATO!!! ¿Flato??? Pero si jamás en mi vida he tenido flato...pues te ha tocado, Manu. Me cuesta horrores coger aire y ya no sé si seguir el consejo de Jesús y parar o no. Bajo un montón el ritmo y en la bajada parece que la cosa mejora, pero en la segunda vuelta vuelve a darme fuerte. En el último km recupero un poco el ritmo, pero acabo con sensaciones desastrosas con un parcial de 20:55, parcial 105º de 204. 

Al cruzar la meta descarto completamente que me haya clasificado y me voy a tomar una Coca cola con Miguel y la familia, que han venido a vernos (¡gracias!). Cuando salen las clasificaciones me llevo una sorpresa. Puesto final, 93º de 204, en mi grupo de edad 20º de 34 finalizados para 23 plazas. Entre abandonos y no presentados me han hecho un favor, y podré correr el Campeonato de España cuatro años después. A ver si esta vez no salgo de antepenúltimo del agua...pero ahora hay que pensar en algo más serio. Half de Riaza, el 11 de agosto, que va a ser una gran fiesta armadilla, con al menos 6 participantes. El recorrido no asusta, pero el calor que pueda hacer acojona un poco.