Triatlón de Allariz 2012

El triatlón de Allariz pasaba por ser una prueba de simple disfrute una semana después de Riaza, pero el sabor agridulce del Half segoviano hizo que llegase con hambre de competición, con ganas de demostrarme a mí mismo que había hecho los deberes en los últimos meses.

La semana había sido de supercompensación total, mucho descanso con la bici en el taller y un toque de calidad el jueves con la improvisada participación en la carrera popular de Oleiros (5km). Aprovechando que Nano estaba por allí de vacaciones, nada mejor que correr una popular antes de tomar una cocacola. Las piernas en dicha carrera respondieron al 100% y las sensaciones de cara a Allariz eran muy buenas.

El triatlón de Allariz es de esos triatlones con solera (llevan más de 20 ediciones), con aire popular y distancia poco convencional: 800 - 24 - 5,5. Dicen que esta ha sido la última edición por cuestiones presupuestarias, y es una pena, porque es un triatlón precioso. Un avituallamiento líquido y unos metros de moqueta en la transición y sería ideal.

Puente Medieval de Allariz, foto de velocidadcuchara.com

Se nada en el río Arnoia, desde el embarcadero hasta el puente medieval, cuyos arcos sustituyen a las boyas como punto de giro. Hay mucho público jaleando y la salida es desde el agua en dos tandas. Por tercera edición consecutiva está prohibido el neopreno. Tenemos 30º, pero es previsible que baje la temperatura a medida que avance la tarde. Me meto a calentar 20 minutos antes y el agua está fría de narices, me río yo de la medición, estaba mucho más caliente en Riaza. Salida en tromba, y al revés que el año pasado, me meto en tres mil fregaos y recibo tortas y patadas por todos lados. Tras el giro en el puente la cosa mejora, aunque voy congelado y sé que el tiempo va a ser malo. Dicho y hecho, 16:39 (son 800m), parcial 60 de 124.

Transición aceptable y empieza el ciclismo. Este sector en este triatlón me encanta, pues es una sola vuelta sin un metro llano pero sin rampas duras. Todo el rato rondando el 2%-6%, lo cual hace que el drafting sea muy útil pero que apretando las tuercas puedas dejar de rueda a los nadadores. A la ida pica más hacia arriba, y tras dos km descansando a rueda, pongo una buena marcha y voy recogiendo y soltando a un montón de gente. Tras el punto de giro aguantan dos, y aunque los suelto de rueda en una subida, no abro hueco, así que los espero para hacer juntos la bajada final, ya que ambos bajan mejor que yo. De vuelta a Allariz ya no cogemos a nadie más. Parcial 17 de 124. Media 32,8km/h incluyendo las dos transiciones. Me cantan que voy de 22.

La T2 me sale muy lenta ya que me he olvidado las plantillas normales de la bici, y he tenido que pedalear con las ortopédicas, así que me toca cambiarlas a las Asics, además de ponerme, como siempre, los calcetines. Las sensaciones corriendo son buenísimas, y las zonas con público, sobre todo niños, son un subidón. El trazado es precioso. 5,5km a una sola vuelta, la mayor parte es llano, con puentes, escaleras, tramos de cross, y una subida bestial a la parte alta del pueblo, acompañada de una bajada empinadísima de vuelta al río. Voy adelantando a tres o cuatro y no me supera nadie. A falta de 300m veo a dos que van casi juntos, intento cambiar y me da para pasar a uno y asegurarme mi primer top 20 en un triatlón. Parcial de carrera 14 de 124. En la general 18 de 124. Contentísimo.

Ahora una semana de vacaciones haciendo trekking en el Pirineo, y a pensar en septiembre, que viene cargadito, con dos olímpicos y el Titán.